MONTSERRAT PAGÈS I PARETAS. El tapís de Bayeux, eina política? Anàlisi de les imatges i nova interpretació, Publicacions de l’Abadia de Montserrat, 2015, 216 p.
ISBN: 978-8498837810
Edición bilingüe en catalán e inglés (traducción de Philip Banks).
La autora, conservadora de pintura romànica en el Museu Nacional de Arte de Catalunya, se enfrenta aquí a una obra enigmàtica como la que más, el famoso Tapiz de Bayeux, cuya bibliografía comienza a ser inabarcable, y nos ofrece una lectura radicalmente nueva, en todos los aspectos.
En el prólogo explica los motivos que la llevaron a ello y previene al lector para que sepa lo que se encontrará. Su método consiste en un análisis detallado de cada una de las escenas representadas y su confrontación con lo que se ha dicho de ellas. Es decir, propone leer las imágenes sin prejuicios, y ver luego como se han interpretado.
Defiende que el Tapiz és una crónica histórica, pero en imágenes, tan valiosa como las crónicas escritas y que, como estas, nos presenta una determinada visión de los hechos históricos que representa, la que quería proporcionarnos quien lo encargó.
Entre otras cosas, l’autora desacredita a fundamentis la teoría según la cual el comitente del bordado habría sido el obispo Odón de Bayeux, hermanastro de Guillermo el Conquistador, para mayor honor y gloria de éste y de su hazaña. Según la autora, la invasión y la conquista de Inglaterra, tal y como se representan en el Tapiz, no tienen nada de heroico, sino todo lo contrario. ¿Cómo explicar, sinó, la gran mortaldad, el saqueamiento de los cadáveres, que los vencidos, mucho peor armados además, en un momento determinado estén a punto de ganar la batalla?, ¿Y que su rey, Harold, sea proclamado REX ANGLORVM?
Basando su comparación en cartularios y en los propios enunciados del feudalismo, va más allá e interpreta de una manera radicalmente distina el famoso juramento de Harold entre dos reliquiarios. Hace notar que ambos reyes, tanto el derrotado, como el vencedor, a lo largo de la historia representada ostentan un comportamiento noble, mientras que no ocurre lo mismo con el del obispo, que es tratado con acritud, con una fina aunque potente sàtira moral. Todo es muy sutil, sin embargo.
Preguntándose cual debía ser el objetivo de semejante obra de arte, quién la encargó, para qué o para quién y con qué objetivo, analiza el contexto histórico y llega a formular hipótesis sorprendentes y totalmente novedosas, que incluyen el arzobispo Lanfranco de Canterbury, un lombardo de Pavía, pacificador, que fue el mayor oponente del poderoso obispo. Una de las más evidentes, no la más impactante, ni la de mayor peso, es que el Tapiz es en realidad un libro, un rotulus para ser leído. Y que, como tal, era una arma política poderosa.
Texto: Montserrat Pagès i Paretas